La participación de Yamaha en el Campeonato del Mundo de Velocidad se remonta a 1961, año en que la empresa participó en el Gran Premio de Francia para competir al más alto nivel. La primera victoria del equipo no tardaría en llegar, y así en 1964 Yamaha ganaría el primero de muchos Campeonatos Mundiales. El éxito de la marca en competición continúa hasta la fecha con más de 500 victorias... y las que están por llegar.

Todas las superdeportivas de la gama R deben su existencia a las motos de competición de Yamaha. El emblemático color blanco con gráficos Speedblock en rojo de la R7 GP 60 Aniversario y su emblema especial 60º aniversario, combinados con el guardabarros delantero rojo, el dorsal amarillo y las llantas doradas, encarnan 60 años de competición en GP y rinden homenaje a las famosas motos de competición y a los pilotos que han contribuido a que Yamaha sea lo que es hoy.